Los informes de vertido autorizado a Dominio Público Hidráulico y al Mar, del Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino de 2008 (en adelante, MMARM), recogen resumidamente el nº total de autorizaciones por vertido y volumen (m3/año) por Comunidad Autónoma, y la naturaleza del vertido, clasificada en 7 tipos. También subdivide en habitantes equivalentes (he) los vertidos urbanos, si son o no peligrosos los vertidos del sector industrial y clasifica en 11 tipos los vertidos agroalimentarios.
Los datos son los aportados por la Comunidad Autónoma correspondiente. Sin embargo, se constata la falta de información en los vertidos, principalmente urbanos, al ser reflejado en las fichas de algunas Comunidades Autónomas como «0 m3/anual», sin especificar que el dato no se ha obtenido o no ha habido fuentes suficientes de consulta. Además se observa que los datos aportados para el sector agropecuario e industrial no son los totales de la cuenca.
Esta falta de información refleja una política hidrológica carente de transparencia de los datos públicos ofrecidos por los organismos oficiales.
Se presenta en esta comunicación un análisis del estado en que se encuentra la Demarcación Hidrográfica del Júcar en cuanto a los vertidos y las posibilidades de reutilización de las aguas residuales depuradas.
OBJETIVOS
- Revisión de los informes de vertido autorizado de la Demarcación Hidrográfica del Júcar (DHJ).
- Identificación de las demandas según los usos del agua (urbano, agropecuario, industrial y otros).
- Comparación de los vertidos autorizados con la demanda de agua según los usos.
- Revisión de la depuración y reutilización de las aguas residuales en la Comunidad Valenciana.
Se han revisado los sistemas de tratamiento de aguas en la franja costera dado el carácter poblacional variable del litoral.
Es importante señalar el riesgo de afección de los numerosos núcleos costeros en el litoral mediterráneo, tanto por los vertidos de EDAR a cauces secos próximos al mar, así como el mismo vertido directo a mar por emisario submarino. En la primera de las consideraciones, la capacidad de autodepuración del río o arroyo es en la mayoría de las ocasiones nula. En la segunda, el emisario submarino desemboca frente a la costa, en muchos casos playas turísticas. Estos vertidos submarinos provocan la eutrofización debida a nutrientes y contaminantes que se acumulan en el tiempo y degradan la costa. Y finalmente algunos microorganismos patógenos como coliformes y estreptococos pueden afectar la calidad de las playas y zonas de baño.
En conclusión, el número de vertidos supera en muchos casos la capacidad de dilución del tramo litoral en cuestión afectando a la biología marina y alterando los procesos tróficos produciendo 'blooms' algales (eutrofización).
De las 443 EDAR existentes en la Comunidad Valenciana, se reutiliza el 50% del agua que depura (depuran 634.000 m3/día lo que suponen 231 hm3/año) que se utilizan para proyectos de restauración medioambiental, regadío en la agricultura y otros usos industriales y/o recreativos. La Comunidad Valenciana cuenta con una red de 50 plantas depuradoras con sistema de tratamiento terciario y con las nuevas instalaciones en construcción permitirán disponer de hasta 350 hm3/año para paliar el déficit hídrico.
Por otro lado, si el ATS (Acueducto Tajo-Segura) se derogara, el déficit alcanzaría 500 hm3/año, lo que supondría un mayor estímulo hacia la reutilización integral del agua depurada en la Comunidad Valenciana para conseguir no verter agua que puede ser reutilizada en sectores muy productivos como el regadío en la Vega Baja (Alicante).
PRINCIPALES VENTAJAS DE LA REUTILIZACIÓN
Agua depurada para reutilización en agricultura de agua de calidad, fundamentalmente de regadío, pilar de la economía de la zona.
Se reduce la explotación de acuíferos, y por lo tanto, el riesgo de intrusión salina. Y gracias a ello a medio-largo plazo la recuperación de los niveles freáticos estables como reserva de agua frente a situaciones de estrés hídrico severas (sequías).
Los parámetros de vertidos al río y a la rambla serán reducidos dentro de los límites establecidos por la legislación vigente. De esta manera se mejora la calidad del agua subterránea por infiltración. Así como evitar en lo posible el vertido directo al mar por emisario submarino, consiguiendo que parte se aproveche en una reutilización (retorno al sistema).
Se conseguirá una mejora de la vegetación de ribera, manteniendo un caudal ecológico estable, determinado en la DMA
Mejorará la eficiencia en el uso del agua al aprovechar el retorno de uso urbano reduciéndose así el volumen de agua realmente consumida por la población.
Se conseguirá mayor disponibilidad del recurso y la sostenibilidad de los usos urbanos y agrícolas creando con ello, un sistema más productivo, sostenible y competitivo.
Creación de puestos de trabajo durante y tras la fase de obras, tanto directamente (sector de la construcción) como indirectamente (sector terciario-industrial). En la fase explotación, finalmente, serán puestos de trabajo permanentes.