La Certificación Forestal impulsa la eco-innovación y promueve nuevas actitudes sociales para cumplir con la sostenibilidad económica, social y ambiental. La producción sostenible y la compra responsable de productos certificados se sitúan en línea con la normativa ambiental que se está incorporando paulatinamente en nuestro país, y da respuesta al compromiso de todos con el desarrollo sostenible. Las actividades relacionadas con la Gestión Forestal Sostenible constituyen un nuevo nicho de economía verde.

Un bosque certificado…

° asegura su productividad (madera, resina, corteza, corcho, esencias, etc.) a largo plazo
° es un hábitat idóneo para la biodiversidad,
° contribuye a la lucha contra el cambio climático, actuando como sumidero de carbono
° promueve la conservación y mejora de las condiciones socioeconómicas y culturales del entorno rural.

Desde la Asociación para la Certificación Forestal PEFC (Programa para el Reconocimiento de la Certificación Forestal) se garantiza al consumidor que la materia prima de los productos proviene de un bosque gestionado de manera sostenible. Consta de dos partes: la certificación de la gestión forestal (Certificación de la Gestión Forestal Sostenible) y la certificación de la trazabilidad del origen de la materia prima en su paso por la industria de la transformación (Certificación de la Cadena de Custodia).

Cada vez son más los municipios que, comprometidos con el medio ambiente, implantan procesos de Agenda 21 Local. Dentro de estos proyectos de desarrollo local, la Certificación Forestal dinamiza los siguientes aspectos:

1. Promoción de la certificación forestal en los montes de propiedad de los municipios y de los vecinos para garantizar su sostenibilidad, perdurabilidad y mejora.

2. Contratación pública verde y compra responsable de productos que proceden de bosques certificados (mobiliario, papel y cartón, corcho, etc.).

3. Promoción del uso de materias primas que proceden del medio natural. La madera es una materia prima renovable, limpia, ecológica y 100% reciclable, con capacidad de almacenar carbono, contribuyendo así a la mitigación del cambio climático.