La Fundación Apadrina un Árbol es una iniciativa de carácter medioambiental, educativo y social, puesta en marcha tras el incendio que, en julio de 2005, arrasó 13.000 hectáreas de bosque y acabó con la vida de 11 personas en la provincia de Guadalajara. Constituida por la Fundación Rayet, la Diputación Provincial de Guadalajara y la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, pretende contribuir a la rehabilitación y restauración del área afectada por el incendio mediante un proyecto de recuperación y educación medioambiental que tiene como objetivos básicos la recuperación ambiental y social de la zona, el desarrollo rural y la educación en valores a través de una serie de iniciativas propuestas sobre la Finca 'Dehesa Común de Solanillos', en el término municipal de Mazarete (Guadalajara), dentro de la comarca de los Pinares del Ducado de Medinaceli y el Alto Tajo. Para ello, se cuenta con un equipo de profesionales altamente cualificados entre los que se incluyen ingenieros y técnicos forestales, docentes, técnicos medioambientales y monitores de ocio y tiempo libre entre otros.
El Programa 'Apadrina un Árbol' fue una de las primeras iniciativas puestas en marcha por la Fundación por el que, a través del apadrinamiento de los árboles nacidos fruto de la regeneración natural o plantados en las labores de reforestación, se persigue un triple fin: concienciación ambiental; motivación para visitar la comarca y gestión integral de la masa forestal. Con los fondos aportados por empresas y particulares, se realizan las tareas de mantenimiento de las especies arbóreas que son el fundamento de la recuperación de la masa boscosa.
Desde su creación en junio de 2006 la Fundación Apadrina un Árbol ha conseguido el apadrinamiento de más de 23.000 árboles gracias a la implicación tanto de los ciudadanos anónimos como de personalidades famosas, empresas e instituciones, que han entrado a formar parte de la gran familia que es la Fundación, que suman ya más de un centenar de entidades implicadas con el proyecto, teniendo como meta recuperar los pinares del ducado de Medinaceli.
Tanto el programa de apadrinamiento de árboles como el resto de las actividades de la Fundación, se desarrollan en la Finca de Solanillos, Mazarete, Guadalajara. La finca abarca más de 2.800 hectáreas situadas en el epicentro del incendio, en las proximidades del Parque Natural del Alto Tajo. Dentro de la Finca de Solanillos, se han rehabilitado unas antiguas instalaciones, convirtiéndolas en un moderno Centro de Educación Ambiental, equipado con sistemas de energías renovables que hacen sostenible su gestión y dotado de aulas, salas expositivas, materiales audiovisuales, habitaciones, comedores, zonas deportivas, etc.
La variedad de actividades, talleres y jornadas que se desarrollan en el Centro de Educación Ambiental, están dirigidas a grupos de todas las edades, desde escolares a universitarios o investigadores. Las instalaciones están preparadas para recibir también a diferentes grupos organizados y colectivos así como empresas para realizar reuniones, congresos o incentivos. Desde su apertura en abril de 2008, el Centro de Educación Ambiental 'Dehesa Común de Solanillos' ha recibido en sus instalaciones a más de 16.000 personas.