Dentro de la batería de medidas propuestas por la Auditoría energética y Medioambiental en el Alumbrado del municipio de Vitoria-Gasteiz, se sugirió la realización de una actuación en el casco medieval de la ciudad que permitiera, tras la valoración de diversas alternativas, mitigar la ineficiencia de las actuales faroles clásicos, mejorando la iluminación de esta zona cuya revitalización económica, turística y social es un objetivo básico para el Ayuntamiento.
El Casco Medieval se ilumina mediante 511 faroles tipo villa, provistos con lámparas y equipos de 250W de halogenuros metálicos, que consumen anualmente 595 MWh (75.000 €/año). Su rendimiento es muy bajo, no superando el 35% en el mejor de los casos, generando alta contaminación lumínica y luz intrusa en los hogares.
Teniendo en cuenta la singularidad estética y social de la zona, se decidió la realización de una prueba piloto, previa a la renovación completa del alumbrado existente, comparando distintas alternativas en una misma calle, cuyo denominador común fue utilizar luminarias de alto rendimiento que aumentasen el nivel de luminosidad y la uniformidad lumínica en la calle, eliminando, a su vez la contaminación lumínica, la luz intrusa y la sensación de inseguridad.
En concreto, la calle Zapatería se subdividió en 5 tramos con el objetivo de que los ciudadanos pudieran ver in situ los efectos lumínicos que aporta cada sistema (farol actual mejorado, lámparas LED, lámparas Cosmópolis, faroles más eficiente colocados en catenaria y adosados a fachada), la uniformidad, el tipo de iluminación, así como la estética más clásica o moderna.
Posteriormente, se buzoneo una encuesta a los residentes para que votasen cual de las 5 alternativas respondía mejor, en su opinión, a las necesidades de iluminación del Casco Medieval y sus gustos estéticos.